miércoles, diciembre 13, 2006

Tierra del fuego

¡Hola a todos! Hoy es nuestro último día en Ushuaia, ciudad que se publicita aquí pomposamente y en todo lugar como "el fin del mundo". Algo de razón tienen, es la ciudad más austral del mundo, pero es más un reclamo turístico que otra cosa. De todas maneras en la ciudad se respira un aire de lugar de pioneros y aventureros mezclado con un poco de nostalgia, seguramente por el hecho de saber que estás muy alejado de todo. A esto también contribuye el clima. Ahora llueve, ahora hace viento, depués sale un poquito el sol. Este es el verano en Ushuaia, nos recuerda un poquito al de Dublin... Aunque aquí haga un poquito más de frio (solo un poquito más, eh?).
No teníamos muy claro lo de venir a Ushuaia, sobre todo Roberto. Nos preguntábamos que podríamos encontrar a parte de la ciudad más austral del mundo, cosa que una vez aquí te da un poco igual y no añade mucho valor a la visita. Al final Ushuaia se ha salvado y hemos llegado a la conclusión de que valió la pena venir.
Hemos estado los 4 días de nuestra estancia hospedados en el hostel Antarctica. Es un hostel muy acogedor, con sofás para relajarte, una cocina muy bien equipada y unos trabajadores muy simpáticos y amables (¡una de ellas catalana!). Lo único malo del hostel es que para ir al baño tenías que pasearte por todo el hostel: cocina, salón, recepción... un palo cuando te acabas de levantar, con esos pelos, el pijama... ¡un poema, vamos!
Esa primera noche fuimos a tomar una par de cervezas al pub Dublin, como no, aquí también hay un pub Irlandés ¡Cómo nos gustan y que buenos recuerdos nos traen! Por cierto, hay una cerveza que destilan aquí, se llama Beagle, que está muy, muy rica, un poco fuertecilla pero merece la pena provarla.
El primer día de nuestra visita lo dedicamos al parque Nacional Tierra del Fuego, como no, estuvimos caminado por varias horas. ¡Nos estamos poniendo muy, muy en forma! Para empezar tomamos el camino de la costa, un paseo de tres horas por pequeñas calas y frondosos bosques. Nos hizo bastante buen día, así que también pudimos disfrutar de un bocadillo bajo el sol. Después de este paseo llegamos a la Península Lapataia que esta repleta de pequeños senderos que se pueden ir enlazando uno con otro hasta llegar al final de la ruta nacional 3, donde nos recogería el bus de vuelta a Ushuaia. Por el camino encontramos una zona, tal cual teletubielandia, llena de montecitos con césped y conejitos ¡ooouuuaaa! También pudimos divisar diferentes tipos de aves, que no tenemos ni idea de cómo se llaman...
Siguiendo por los caminitos llegamos a la castorera. La zona de Ushuaia está llena de estos animales pero, como nos contaron en el hostel, no se trata de un animal autóctono. Lo trajeron aquí para "cultivarlos" para el negocio de las pieles, al final se han convertido en una plaga y los encuentras por todos los riachuelos. Roberto se quedó alucinado con estos animales que construyen verdaderos diques en los ríos para contener el agua y convertir la zona en su hábitat. Lo malo es que los castores no salen hasta la tarde noche, sobre las 7 de la tarde. Además, son muy uraños así que si presienten que estás allí no salen. Por supuesto ese día no vimos ninguno. La zona estaba llena de gente hablando y chillando... Pero una semillita quedó sembrada en la mente de Roberto, que no quería irse de Ushuaia sin ver uno. ¡A ver cómo nos lo montamos!
De vuelta en el hostel decidimos ir a comprar algo al super para cenar, pero resulta que es domingo y que está cerrado. ¡Vaya por dios! Habrá que irse a tomar una parrillada ;-) Fuimos a un restaurante de tenedor libre donde puedes comer carne hasta reventar. Nosotros lo que queríamos probar era el cordero fueguino, que se asa entero agarrado por las cuatro patas a unos palos. En ese restaurante, aunque fuera tenedor libre, sólo podíamos tomar una porción de cordero... pero, ¡qué bueno estaba! Regamos la cena con un vino de Mendoza, el Norton, que también estaba de lo más rico. Así que con el estómago lleno y embriagados por el vino nos fuimos felizmente a dormir.
Al día siguiente decidimos subir hasta el glaciar Martial que está a unos 7km de Ushuaia. Tomamos un taxi hasta la base, donde hay unos telesilla que te suben un poquito más arriba. Pero como nosotros estamos ya de lo más fuerte y hechos unos trekkers pasamos del telesilla y subimos caminando por una pista de esquí (sin nieve claro...), el camino tampoco era muy largo y nos ahorramos 50pesos (unos15€) que parece que no pero el dinero vuela! Una vez arriba seguimos caminando unos 45 min más hasta el glaciar. El glaciar Martial no tiene nada que ver con el Perito Moreno, parece sólo nieve en una montaña. De todas maneras, la caminata merece la pena sólo por las vistas de la ciudad.
Después de la visita al Martial fuimos a comer al hostel y contratamos una paseo en barco de tres horas por el canal Beagle. El barco que tomamos tenía mucho encanto. El Barracuda se contruyó en los años cincuenta y siempre ha sido un barco de pasajeros. Originalmente realizaba viajes por el rio Paraná hasta que, 30 años atrás, se convirtió en la primera embarcación de la ciudad austral en llevar turistas a recorrer el canal, y sigue hoy haciendo la misma ruta. En el barco se han preservado los pequeños detalles que le imprimen su encanto particular, especialmente en el comedor con sus veladores de bronce y sus bancos de madera. Durante el paseo se pueden avistar islotes repletos de diferentes tipos de aves y colonias de lobos marinos. Al final de la ruta se llega al famoso faro Les Eclaireurs, un verdadero símbolo de la ciudad del fin del mundo. El faro se contruyó sobre el 1800 algo para anunciar la proximidad de la ciudad de Ushuaia. Nunca ha estado habitado, funciona de forma automática desde que se contruyó y nunca ha dejado de funcionar desde entonces.
Después del paseo volvimos al hostel y Nuria fue a un ciber café para navergar un ratito y, bueno, con la mala suerte de que unos chiquillos le robaron la cartera mientras ella miraba absorta la pantalla. Sólo había 50 pesos en ella pero la suerte nos acompaña y la cartera fue devuelta con todo el dinero gracias a la abuelita del niño. ¡Increíble!
Al día siguiente, decidimos alquilar un coche para hacer una pequeña ruta por el norte de la isla. El camino nos llevó hasta un par de lagos: el escondido y el Fagano. El tiempo no acompañaba mucho, llovía y hacía mucho viento así que no paramos allí por mucho tiempo. Pasamos por un pueblo, o comuna como dicen sus carteles, llamado Tolhuin que tiene una famosa cafetería-pasteleria. Allá compramos unos dulces, si son tan famosos será por algo... Después continuamos hasta el cabo San Pablo donde nos habían dicho que hay un barco en la costa que naufragó hace 25 años y en el que se podía subir si la marea estaba baja. La imagen de ese gran barco abandonado enmedio de la costa es alucinante. Lo malo fue que la marea no estaba baja del todo, así que era un poco complicado subir. Nos conformamos con verlo desde abajo y hacerle unas cuantas fotos. De vuelta el tiempo había mejorado muchísimo y el sol brillaba. Era hora de buscar una castorera para ver si veíamos un castor. Nos dijeron de un par de sitios donde podíamos preguntar pero en todas ellas tenías que contratar una excursión un poco cara para que te dejaran pasar. Así que nos tocó buscar una. Aparcamos el coche al lado de un camino para probar suerte y la tuvimos. Después de caminar unos 5 min encontramos una castorera literalmente en medio del camino. Nos sentamos sin hacer ruido y a esperar. A los 10 min, ¡apareció un castor nadando por el agua! Qué sorpresa. Después cambiamos de lugar y pudimos ver cómo salía del agua por uno de los túneles subterráneos que contruyen para coger ramitas y volver por el mismo lugar hacia el agua. Estuvimos en total una hora y media para ver 4 de sus apariciones estelares. Nos quedamos congelados pero mereció la pena y Roberto se quedó finalmente feliz tras haber visto al gracioso animalito.
Llegamos sobre las 10 de la noche a Ushuaia, comimos una pizza y nos fuimos pronto a dormir. ¡Estábamos reventados!
Hoy marchamos hacia Buenos Aires. Tomaremos un avión en pocas horas. ¡Mañana nos dirigimos hacia las famosas cataratas de Iguazú y al calorcito!
¡Muchos besos a todos!



En el parque Nacional Tierra de Fuego

Ouuuaaaa!!! Los conejitos de los teletubbies

Unos pajaros en el parque Tierra de Fuego

Mas parque

Una castorera en el parque

El final de la ruta Nacional 3 en el parque Nacional

Vistas de Ushuaia desde el glaciar Martial

El telesilla que sube hacia el glaciar


El Barracuda

El salon del Barracuda

El islote de los pajaros y los lobos marinos en el canal Beagle

Los lobos, como no, durmiendo


Otro islote lleno de pajaros


El lago Escondido

El Desdemona en la costa del cabo San Pablo

La castorera de nuestro castorcito

¡A ver quien encuentra el castor!

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola, otra ves,,,,
No he observado un pase de modelos del castor,,, después de 4 horas !!!
bueno , por Alaska pasais, solo está a 17500 kms..., bueno, en serio, me han impresionado las fotos de la Tierra de Fuego, esta tierra la había visto en mi imaginación en novelas, historias, etc... , creo que habéis hecho una excelente opción visitándola, es mítica,,
besos del cunyao y las 3 niñas,,,

Anónimo dijo...

Hola Hola!!!! que hace dias q no os leo y vaya harton me acabo de pegar ahora! 5 paginas de golpe! es que con esto de la fama, ya se sabe, no me queda tiempo de naaaa!!! Ala a disfrutar q ya se acaba! nos vemos la semana que viene no? No en Argentina no, en Reus! A por cierto, ya hos he dicho que me han fichao de nuevo! y ahora pa mas largo! ya os contare, besos. Super Mireia

Anónimo dijo...

Hola Hola!!!! que hace dias q no os leo y vaya harton me acabo de pegar ahora! 5 paginas de golpe! es que con esto de la fama, ya se sabe, no me queda tiempo de naaaa!!! Ala a disfrutar q ya se acaba! nos vemos la semana que viene no? No en Argentina no, en Reus! A por cierto, ya hos he dicho que me han fichao de nuevo! y ahora pa mas largo! ya os contare, besos. Super Mireia

Anónimo dijo...

Despues de 10 horas buscando el animal,al final hemos visto el castor.Ya estamos esperando el dia de llegada.besos Berta

Anónimo dijo...

Despues de 10 horas buscando el animal,al final hemos visto el castor.Ya estamos esperando el dia de llegada.besos Berta